jueves, 31 de enero de 2013

Escuela Para Padres

La ESCUELA PARA PADRES, entiéndase padre y madre, realizada en forma virtual, tiene los siguientes objetivos:
  • Educar a los padres, para que con su ejemplo y conocimientos de las virtudes y valores humanos, puedan educar a sus hijos.
  • Enseñar cómo educar a los hijos.
  • Que los padres aprendan a vivir un armonioso, fecundo y largo matrimonio.
  • Tender un puente entre la educación familiar y la Fe.
Nadie enseña a los padres a ser padres, lo tenemos que ir aprendiendo en base a lo que dicen los técnicos “ensayo y error”, para cumplir con la sagrada misión de ser cónyuges y padres. Pero con los hijos y el cónyuge no es lo mismo, pues los errores que se pudieran cometer pueden ser irreversibles. Es muy recomendable asimilar y copiar lo que nuestros propios padres nos han enseñado, pero no hay que olvidar que en la época que nos enseñaban no había los mismos medios que ahora, ni las cosas eran iguales, en presiones externas y en el núcleo familiar. Tenemos que mantener los principios generales que nos enseñaban, sobre la educación en las virtudes y valores humanos y añadir a esos principio, lo que sea necesario para sin perderlos, adaptarlos a la sociedad actual.
Tenemos que intentar que nos enseñen los que saben, los que tengan experiencia demostrada en educar a los hijos. Para educar bien a los hijos, primero tienen que estar muy bien educados los padres, para poder dar ejemplo y así que los hijos vayan aprendiendo lo que les enseñan los padres. Lo mismo ocurre con los matrimonios, hay que formarse muy bien desde el noviazgo, para que los matrimonios sean felices y duraderos. Eso solamente se consigue aprendiendo de los que saben. Por lo tanto asistir a una escuela virtual para padres, es una buena inversión de tiempo para el presente y para el futuro, a la que hay que dedicar el máximo esfuerzo y entusiasmo, pues los padres son los primeros y principales responsables de educar a los hijos.
Hay dos grandes conceptos de escuelas: Las que están en un edificio, con su variante de Homeschooling para los hijos y las escuelas virtuales para padres, que enseñan las materias a través del Internet, mediante envíos periódicos de temas desarrollados por los profesores, mas la posibilidad de que los padres pueden preguntar lo que consideren conveniente, sobre los artículos recibidos o sobre temas personales o familiares. Hay muchas escuelas clásicas en edificios para alumnos y muy pocas escuelas virtuales para padres.
Escuela con edificio y escuela virtual. Las principales diferencias son que en las escuelas con edificio, hay homogeneidad de los alumnos, pues están clasificados por edades, conocimientos, e incluso sexos. Los profesores tienen preparadas las materias en función de cada aula. La totalidad de lo que se enseña, está adaptada a las características que tienen en común la mayoría de los alumnos de la clase. Esto mismo aplica a las escuelas de niños y a las universidades, pues en ambos extremos los alumnos son muy homogéneos en conocimientos.
La Escuela Virtual para Padres tiene muchas de las características del Homeschooling, ya que también los padres pueden hacerlo desde la misma casa a través del Internet, horarios, tiempo de dedicación, ritmo de aprendizaje, adaptación a cada alumno, eliminación de los viajes a la escuela, etc. Asistir los días y las horas que pueden y marcar su ritmo de preferencias y aprendizaje, en función de sus necesidades. Hay un menú y los alumnos van estudiando la asignatura que mejor se adapta a sus necesidades. No tiene la disciplina de los grados académicos, pues se adapta a las necesidades de cada alumno, ya que estos comienzan a asistir a la Escuela para Padres en distintas fechas y con diversos niveles de edad, conocimientos, situación económica, número de hijos, edades y características de ellos, relaciones matrimoniales y familiares, situación religiosa, económica, social, familiar, etc. No hay titulaciones del gobierno ni de ninguna institución, es puramente aprendizaje adecuado a cada uno. La Escuela para Padres al ser virtual, se expande por todo el mundo con los únicos límites que tenga el Internet.
Los alumnos de las escuelas virtuales tienen características heterogéneas, en función de ellos mismos y de las circunstancias de sus hijos, de sus familiares o de la sociedad donde vivan, pues tienen diferentes edades, número de hijos, edades de los hijos, diferentes educaciones, diferentes situaciones económicas, hijos, hijas o ambos, educaciones diferentes. En las escuelas virtuales el alumno elige aprender, lo que cree que mejor le conviene aprender, escogiendo de un menú de temas que pone la escuela a su disposición. Todo dependerá de las características y deseos de aprender, que tengan los padres. Los padres tienen que pensar por ellos mismos, lo que quieren estudiar, en lugar de recibir la información enlatada por los profesores, para todos los alumnos por igual. No tienen que aprender lo mismo, los que llevan muchos años de casados y tienen hijos mayores o en diferentes edades, que los que se acaban de casar y están esperando un niño. También hay familias tradicionales, parejas de hecho, familias monoparentales, tipos diferentes de sociedad donde habitan, familiares con los que conviven, religiones iguales o diferentes, y un largo etcétera. Aquí nadie sabe las características ni circunstancias de cada alumno, solamente las que quieran comunicar, en caso de que haga consultas personales. No tienen que conocerse entre ellos, ni los alumnos, ni los maestros, ni los administradores. Nunca se tienen que identificar, ni los lectores, ni los profesores. Si alguien quiere hacer una consulta privada, tiene la opción de que utilice un seudónimo para que sienta más libertad al escribir.
Las materias. En las escuelas virtuales no hay asignaturas ni programas obligatorios. Las materias son también muy heterogéneas, dependiendo de las edades de los hijos y las situaciones maritales, económicas, religiosas y sociales. Las materias, expresados en artículos, se actualizan continuamente y se van añadiendo otros nuevos, a medidas que van ocurriendo situaciones en la sociedad. Los temas los eligen los alumnos entre los ofrecidos, en función de las características y necesidades específicas de cada uno, de lo que considere que quiere aprender, del momento que los necesite y de lo que le recomienden los profesores. La Escuela para Padres está hecha a la medida de cada alumno. Todas las materias están reflejadas en artículos independientes y casi siempre monográficos, aunque interrelacionados unos con otros. Lo que los alumnos aprecian es el mensaje, no el mensajero, pues lo desconocen.
Principales virtudes y valores humanos que se desarrollan en los artículos para aplicarlos en las relaciones entre los matrimonios, para la educación de sus hijos, para las de los hermanos entre si, para las de la familia con sus parientes, amigos y sociedad, etc.: Abnegación. Aceptación. Acogimiento. Aconsejar. Agradecimiento. Alegría. Amabilidad. Amistad. Amor. Apostolado. Aprender. Aprovechar. Arrepentimiento. Autenticidad. Autodisciplina. Ayudar. Belleza. Bien común. Bondad. Disciplina. Búsqueda. Callar. Cambio. Carácter. Caridad. Castidad. Coherencia. Colaboración. Compasión. Comprender. Compromiso. Conciencia. Conducta. Confianza. Conocimiento. Constancia. Consuelo. Control. Conversar. Cooperación. Coraje. Cordialidad. Cortesía. Creer. Criterio. Dar. Deber. Decisión. Desprendimiento. Dialogar. Dignidad. Diligencia. Discreción. Disculpas. Disposición. Dolor. Dudas. Educación. Ejemplo. Entrega. Entusiasmo. Escuchar. Esfuerzo. Esperanza. Espíritu crítico. Estima. Estudio. Examen. Ética. Familia. Favor. Fe. Felicidad. Fidelidad. Formación. Fortaleza. Fraternidad. Generosidad. Gratitud. Habito. Hablar. Hacer el bien. Halago. Heroísmo. Hogar. Honestidad. Honor. Honradez. Hospitalidad. Humildad. Humor. Igualdad. Imitar lo bueno. Inocencia. Justicia. Lealtad. Lectura. Lenguaje. Libertad. Liderazgo. Limosna. Lucha. Madurez. Matrimonio. Meditación. Misericordia. Moderación. Moral. Mortificación. Naturalidad. Obediencia. Objeción de conciencia. Objetivos determinados. Olvido. Optimismo. Oración. Orden. Paciencia. Palabra. Pasar desapercibido. Paternidad. Paz. Penitencia. Pensar. Perdón. Pereza. Perfección. Perseverancia. Piedad. Plan de vida. Pobreza. Preocupación. Prever. Prójimo. Promesas. Prudencia. Pudor. Razón. Rectitud. Reflexión. Religiosidad. Respeto. Responsabilidad. Sabiduría. Sacrificio. Salud. Secreto. Sencillez. Sensatez. Sentimiento. Serenidad. Seriedad. Servicio. Servicio. Silencio. Simplicidad. Sinceridad. Solidaridad. Sonreír. Sufrimiento. Temor. Templanza. Ternura. Tiempo. Tolerancia. Trabajo. Trato. Unidad. Valor. Ver. Verdad. Vergüenza. Vida. Virginidad. Vocación. Voluntad, etc.

4 comentarios:

  1. Una buena propuesta es el principio de una necesaria e imprescindible educación continua, sobre todo para ir desarrollando las virtudes y valores humanos, y asi poder educar bien a sus hijos, siendo un ejemplo para la sociedad.

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  2. Seria muy buena idea implementar este tipo de proyecto no solo en campeche si no en todo el territorio nacional, ya que con una buena educación México crece.

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  3. Buena idea amiga, esto seria bueno aplicarlo a los mexicanos y así tener conciencia de que un país que es rico en educación es un país poderoso combatiendo de esta manera la ignorancia.

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  4. La Escuela de Padres puede ser enriquecedor a nivel personal y nos puede proporcionar a nosotros como padres los conocimientos prácticos que a veces no vemos por los problemas que estamos pasando, pero que realmente si los ponemos en práctica, nuestros problemas nos van a enseñar a ser más fuertes y mejores personas y así brindarles una mejor educación a nuestros hijos.

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